La oposición de Siero ha reaccionado con escepticismo a las declaraciones de Luis Vázquez en alusión a la urgencia de acometer la rehabilitación del casco antiguo de Pola de Siero, que se encuentra en muy mal estado, con numerosos edificios que amenazan ruina, solares abandonados y, en general, un gran descuido en calles y viviendas.
Los portavoces de los partidos políticos coinciden en que es una actuación urgente, pero también en que resulta muy difícil de acometer.
El portavoz del PSOE, Ángel García, «Cepi», declaró que «Vázquez no se da cuenta de que está en el gobierno porque hizo un discurso como si fuera de la oposición; es el PP el que está elaborando el presupuesto, con lo que, si creen que es urgente y es su prioridad porlítica, que lo desarrollen; está en sus manos. Que demuestren la urgencia actuando con rapidez y el PSOE los apoyará», añadió el portavoz socialista, quien advirtió de que «no se puede pretender rehabilitar el casco antiguo con dinero público con los tiempos que corren». En todo caso, García aseguró que si, finalmente, se toman medidas para recuperar la zona, el PSOE las apoyará sin ninguna duda.
Por su parte, el portavoz del Pinsi, Juan Camino, consideró que «hace años que es urgente la reforma del casco antiguo», aunque, en su opinión, «un equipo de gobierno debe tener los elementos suficientes para hacerlo».
Según aseguró, «si gobierna el Pinsi sabrá cómo se hace sin coste para el Ayuntamiento». Pero no va a adelantar nada sobre esa forma de hacerlo porque «hago constantemente propuestas y no me hacen ni caso, con lo que, en esta ocasión, me lo guardo para mí».
El portavoz de IU, Nicolás Fernández, valoró que la recuperación es urgente, pero repuso que existe el problema de que «se trata de edificios de propiedad privada». El Ayuntamiento tendría la posibilidad de rehabilitar de oficio los inmuebles, pero «en época de crisis nadie entendería un gasto tan grande».
Otro modo sería una línea de ayudas o de subvenciones, para la cual se plantearía la necesidad de modular las ayudas. «Hay que tener mucho cuidado al repartir las subvenciones en proporción a las rentas, ya que existen propietarios con capacidad para rehabilitar los edificios que están esperando a que se caiga o a recibir las ayudas».
En todo caso, Nicolás Fernández entiende que el proyecto es «muy difícil de realizar por falta de recursos». Sin embargo, cree que «el Ayuntamiento tiene la obligación de ser más riguroso con el problema de la seguridad y no lo está siendo». En su opinión, debería exigir a los propietarios de edificios que representen un peligro para los viandantes que vallen el exterior o que tomen otro tipo de medidas similares. El Ayuntamiento no sólo puede, sino que debe hacerlo, afirma.
Por último, el concejal no adscrito Julio Carretero indicó que rehabilitar el casco antiguo «es urgente» y subrayó que durante su etapa como edil de Urbanismo, en el anterior gobierno socialista, «fuimos incapaces de sacarlo adelante por falta de la inversión necesaria».
Ahora, «si por el discurso del portavoz del PP es una prioridad del equipo de gobierno, contará con nuestro apoyo. Yo lo intenté y no fui capaz; dado que él entiende que es prioritario, animaré, sin duda, al equipo de gobierno», apostilló.
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